Mikel Erentxun

“No son buenos momentos, efectivamente, pero paradójicamente me encuentro en un momento buenísimo creativamente hablando y sigo trabajando un poco al margen de todo eso, creo que es lo que hay que hacer.” (Mikel Erentxun)

[Texto]: Alfredo Rodríguez
[Fotografías]: Albert Manau

Hablar de Mikel Erentxun es hacerlo de uno de los músicos más representativos del rock de nuestro país. Con más de media vida dedicado a la música, el cantante y guitarra presenta su nuevo trabajo, 24 Golpes (Warner Music, 2012), un disco donde muestra su actual cara, donde la madurez, la sinceridad y la humildad juegan papeles importantes a partes iguales. Dos años después de su anterior larga duración, lanza un disco que le vuelve a poner en boca de todos, teniendo que defender un nuevo repertorio en directo y donde el público está ofreciendo el respeto y el cariño que el artista merece.

· Tu carrera en solitario comenzó hace veinte años. ¿Cómo te encuentras a día de hoy después de todo este tiempo recorrido?

La verdad es que da un poco de vértigo cuando te plantan estas cifras delante porque son 20 años en solitario y 26 desde el primer disco de Duncan Dhu. ¡Este es mi disco número 21! Este tipo de cifras asustan pero por otro lado ilusionan. Asustan por el tema de la edad que lo llevo muy mal. (risas) Si llevas tantos años en la música es que tienes muchos años. El tener una carrera larga y una carrera coherente es algo a lo que siempre había aspirado y jamás pensé que podría llegar. Es lo que todos buscamos, es el sueño de cualquiera y estoy en ese sueño. Encima siento que ahora es cuando mejor estoy y es todavía más ilusionante. Me encuentro en mi mejor momento, creo, por lo que es una buena señal.

· Aunque también tendrá que juzgar el público, tu familia, tus amigos…

¡Sin duda! Yo me veo bien porque estoy más asentado gracias a la edad, la estabilidad de mi familia y porque mi voz ha evolucionado mejor con el paso del tiempo y de los años. También escribo mejor y canto mejor, creo que todo es positivo.

· Publicas tu nuevo disco bajo el título de 24 Golpes (Warner Music, 2012). ¿Cómo te enfrentas al lanzamiento del mismo? ¿Qué significado tiene?

Este nuevo disco precisamente habla de esto que estamos comentando ahora, del paso del tiempo, haciendo referencia a las 24 horas de cada día, cada una es como un golpe, esa sensación de que el tiempo se divide en 24 que avanza, nunca retrocede y nunca se para, son inquietudes que uno tiene, me imagino, cuando uno empieza a tener una edad. En este disco escribo un poco sobre ello, sobre las inquietudes de personas de mi edad con hijos, con pareja, qué piensa sobre el pasado, sobre lo que le queda de tiempo en la vida y de ahí viene un poco el título. Este disco habla de un año, en concreto 2011, que es cuando escribí las canciones, sobre las cosas que han pasado por mi cabeza en ese año, los diferentes estados anímicos a los que me he enfrentado: ha nacido un hijo, he perdido a un amigo, de repente me he visto mayor, de pronto me he empezado a plantear si conoceré a mis nietos… ¡Etapas de la vida! De repente estás con 45 años y piensas: «¡Coño, he vivido más de lo que me toca por vivir!». Yo antes no pensaba en eso y ahora todo influye. Y eso que siempre tiendo a vivir el presente y no me gusta mirar para atrás, no me gusta vivir de rentas, no soy una persona especialmente nostálgica y muchísimo menos previsora, no miro nunca el futuro, no hago planes, voy paso a paso y solo se lo que voy a hacer mañana, no dentro de un mes.

· Destaca que realizaste la grabación del disco en una iglesia de Nueva York. ¿Cómo surgió la posibilidad de llevar a cabo ese proceso en un sitio tan particular?

Lo que elegí fue el ingeniero del disco, Henry Hirsch, a quien conocía de referencias y había hablado con él otra vez porque estuvo a punto de trabajar conmigo en otro disco hace tiempo. Las canciones me llevaron hacia un disco de rock y tuve suerte porque fue a la primera persona a la que le envié un e-mail y le dije que tenía un disco nuevo, quiero hacer esto, tengo poco dinero, etc. Le envié una canción, ‘Cuervos Blancos’, la que abre el disco. Me contestó ese mismo día diciendo que le gustaba mucho y le dijese el dinero del que estábamos hablando. Le contesté diciendo que se iba a reír pero me contestó diciendo que podíamos hacerlo pero tendría que ir a su estudio para grabar con su gente en 10 días. A mi me pareció muy poco tiempo porque estoy acostumbrado a grabar en 20 y 30 días. Y bueno, nos lanzamos a esa aventura y al final eso ha tenido un peso brutal en el disco porque suena así por haber sido grabado allí, teniendo ese sonido tan vintage, tan viejo, tan cartón… Está conseguido porque ese estudio no tiene nada digital y luego el haberlo grabado en 10 días supuso grabarlo en directo, más deprisa, que no se retocase nada, que no hubiera nunca una corrección, que haya quedado un disco sin maquillaje, muy directo. Es todo crudo, directo, honesto, es muy minimalista en los arreglos y todo eso le ha sentado fenomenal a las canciones. Si lo hubiésemos hecho con más tiempo no sería tan bueno.

· Igualmente, has trabajado en formato analógico en lugar de hacerlo en digital, tan habitual en los tiempos que corren. ¿Qué supuso utilizar ese formato?

Realmente tengo la suerte de que todos mis discos, salvo uno, han sido grabados en formato analógico, lo que pasa es que ahora hago hincapié en ello porque es más raro y lo hago para diferenciarme. No quiero decir que sea mejor ni peor, sino que soy distinto. Pones la radio y todo el mundo suena de una manera y yo sueno de otra, es una cuestión de gustos. Creo que el rock ‘n’ roll no se entiende en formato digital porque queda muy artificial y frío. La gente afina cada golpe de caja, mete la voz por una máquina, corrige todo, corta, pega, copia y edita sin pensar. A mi eso no me gusta y digo que es cuestión de gustos. Como te decía hice uno en digital, concretamente ‘Te Dejas Ver’, en el año 2000 aunque lo grabamos en analógico y lo mezclamos en digital. Esa fue mi única incursión en ese mundo, lo grabé en tres meses en California con un presupuesto altísimo y es un disco maravilloso pero no es lo que me gusta, prefiero un sonido más crudo.

· De las catorce canciones que forman el disco, ¿cuál podrías destacar, por algún motivo en concreto? Bien sea por temas de composición, significado de la letra, por la música…

Hay alguna canción más especial que otra, claro, por ejemplo ‘Penumbra’ que se la he dedicado a mi hijo. Es la única vez en mi vida que he hecho algo así. Pretendía hacer una nana pero me salió un rock ‘n’ roll. (risas) ¡Yo lo sigo viendo como una nana pero es una nana rock! En el disco encaja muy bien y quién sabe si será un single, aunque hay dos o tres canciones que pueden ser singles y esta sería una de ellas. Cada canción es importante para mi, eso está claro, pues todas tienen algo especial, algo que me marca, alguna parte musical a destacar, cambios, arreglos… Y bueno, el primer single también dice mucho del resto de las canciones del disco.

· ¿Cómo definirías el sonido del nuevo disco? Se comparan algunas canciones con The Beatles o David Bowie.

Para mi el sonido en este disco es definitivo, es decir, en pocos discos el sonido es tan importante, aquí es primordial. Es un sonido clásico, lo he comentado antes, muy crudo, muy cálido, muy de verdad, con un sonido muy honesto y sobre todo un sonido muy antiguo. Tú escuchas el disco y parece que está grabado hace treinta años, no es un disco actual. Quizá sí lo es, pues está de moda el sonido de antes porque hay una corriente ahora de vuelta al pasado y de gente que está grabando en formato analógico. Ahí tienes a The Black Keys que me parece la banda del momento, es analógico 100%, suena a garage, suena cutre y suena acojonante. Es como si fuese una maqueta y sin embargo es maravilloso. Y sobre la comparación que comentas hay pinceladas en las canciones de cómo hacían ellos otras cosas, es decir, es una forma de trabajo. Es como si dices, este bajo podría entrar como esta otra de David Bowie o si escuchas un tema de The Beatles con el que te sientes identificado y tomas cosas de aquí y allá. Y bueno, The Beatles es mi grupo de referencia número uno y quienes más me han influido a lo largo de mi vida y Bowie también es una gran influencia y en este disco también. También me ha influenciado Lapido, que de hecho tiene una canción aquí dentro y me he transmutado un poco en él a la hora de cantarla, Quique González, Diego Vasallo…

· ¿Cómo te enfrentaste al proceso de composición del disco? ¿Tenías una idea de las canciones y las letras antes de grabar el disco?

No he planeado nada sino que las canciones van naciendo a lo largo de muchos meses. En plena gira comenzaron a nacer las canciones, una te lleva a otra y todo empieza a tener sentido. Llegué a tener 28 canciones, comenzó siendo más acústico y acabó siendo más rock porque a mitad del trayecto vi que tenía una entidad muy interesante y entonces al final eliges las mejores canciones que se adaptan a ese estilo. Hay canciones muy buenas que se han quedado fuera porque no entraban en ese concepto y este disco es muy conceptual.

· ¿Y esas canciones se podrán escuchar en algún momento?

Sí, algunas de esas canciones que podrían parecer descartes son igualmente canciones que se han publicado en el otro disco.

· Te refieres al disco extra, Eléctrica Pkway, que se ha regalado a los 1.000 primeros compradores de 24 Golpes, ¿verdad? ¿Qué nos cuentas sobre ese disco?

¡Eso es! El disco extra reúne diez canciones que creo que son muy buenas, por lo menos al mismo nivel que las incluidas en 24 Golpes a nivel de calidad pero no a nivel de estilo porque uno es conceptual con canciones muy breves, muy directas y con un armazón de rock. Por eso todo lo que no era así no entraba en ese disco y lo quise dejar para el otro. Hay canciones que me gustan mucho como ‘Intacto’ o ‘Veneno’ que me parecían muy buenas y por eso las regalo en otro disco. Estilísticamente no entraban a nivel de estilo y las regalo porque me apetece. Este disco lo grabé en mi casa y es menor en el sentido de que lo he grabado tocando todos los instrumentos y no tiene la calidad que puede tener el otro. Pero es un disco a fin de cuentas, un disco hecho y derecho.

· Entonces podrías haber publicado un disco doble…

¡Por supuesto! Yo lo veo como dos discos lo que pasa es que uno se compra y otro se regala. Yo me presenté en Warner y les dije que tenía un disco de coste cero, fabricaron las copias y se regaló con los primeros compradores. ¡Y se agotó! Ahora la gente me escribe pidiendo el disco y lo quiere pero no se puede hacer nada. Supongo que pondré un enlace en la web para regalarlo o algo. En iTunes se puede comprar en formato digital, pero no está en formato físico. Bueno, ahí no se pueden comprar dos discos, sino que está la edición deluxe.

· ¿Entonces los fans que te escriben pidiendo el disco no podrán tenerlo?

Otra de las posibilidades es que Eléctrica Pkway se fabrique en vinilo y se venda en los conciertos, no se, hacer algo especial. Quiero que mis canciones sean escuchadas, no importa el formato, pero sí quiero cuidar mucho esos detalles, contentar al público y a mis fans que son la base de todo esto.

· ¿Cómo se enfrenta un artista tan longevo al actual mundo de la industria musical? Me refiero a componer, grabar, la venta de discos, la piratería, otra nueva gira, salir a la carretera, etc.

Bueno, ahora mismo coincide todo esto con la peor época que he conocido de la industria musical, como dices, porque se venden muy pocos discos. Ahora pasas de vender 50.000 discos a vender 8.000, ese tipo de proporciones. De hecho las tiendas de discos están cerrando y mucha gente se ve afectada. Incluso el disco de oro ha bajado su cifra de ventas. No son buenos momentos, efectivamente, pero paradójicamente me encuentro en un momento buenísimo creativamente hablando y sigo trabajando un poco al margen de todo eso, creo que es lo que hay que hacer. Tengo que pensar que tengo canciones, tengo mi público y uno tiene que ser honesto consigo mismo y hacer canciones sin pensar en los números. Ahora mismo hacer un disco es muy poco rentable y aunque digan que se compensa con los conciertos no es cierto porque no todo el mundo va a las salas. Antes había conciertos gratuitos pagados por los Ayuntamientos pero ahora solo queda trabajar y hacer cosas buenas. Llegará el día en que tengamos que regalar todos los discos y que la gente venga a los conciertos y tratar de equilibrar un poco.

· ¿Cuándo comenzarás tu gira? Hay mucha gente esperando tu directo presentando tu nuevo disco.

La gira empieza en Zaragoza en abril pero antes tengo conciertos confirmados en México y en Estados Unidos. Primero América y luego España, ha surgido así aunque estemos de promoción estos días, primero viajo con la banda y luego comenzamos en España. La gente está esperando mis conciertos y espero responder pues las críticas están siendo muy positivas.

[Febrero 2012]

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