Es difícil enfrentarse a un nuevo disco de Nine Inch Nails cuando piensas que la ausencia de guitarras y energía en casi cualquiera de las canciones que han pasado por las manos de Reznor en los últimos tiempos es preocupante. Más aun cuando, tras una primera escucha, te das cuenta de que Hesitation Marks (Columbia Records, 2013) no va a romper la línea seguida por el oscarizado músico en estos años. El nuevo trabajo de Nine Inch Nails llega cuando nadie lo esperaba, con Reznor inmerso en la realización de bandas sonoras y en su nuevo grupo, How To Destroy Angels, proyecto llevado a cabo junto a su mujer, Mariqueen Maandig, y que muestra un alto grado de influencia en los NIN de 2013. No es malo el comienzo de Hesitation Marks, con el pegadizo ritmo de ‘Copy Of A’ y una ‘Come Back Haunted’’ que recuerda a su With Teeth (Nothing Records, 2005) y que no desentonaría como un mal tema en aquel disco publicado en 2005. El despropósito comienza en cuanto ésta termina y se suceden una serie de temas como ‘Find My Way’, ‘Disappointed’, ‘Satellite’ o ‘I Would For You’, canciones que en su minimalismo se convierten en versiones insípidas de lo que un día fueron Nine Inch Nails. Tan solo ciertos momentos, como el agresivo comienzo de ‘In Two’, con Reznor por primera vez mostrando la energía de su voz, el acertado estribillo de ‘Various Methods Of Escape’ o incluso esa ‘Everything’ tan directa y de corte tan pop que supone un respiro en medio de un disco tan carente de ritmo, hacen que el desastre no sea total. A Hesitation Marks tal vez se le podría achacar que es una mera excusa para que Reznor ponga a rodar de nuevo su proyecto de más éxito pero, por desgracia, me da que el prolífico músico norteamericano se siente más que satisfecho con el rumbo tomado en su nuevo trabajo.
[Texto]: Iván Díaz
