Cualquiera que me conozca sabe de mi pasión por Biffy Clyro desde que escuché aquella eterna intro electrónica de ‘Glitter And Trauma’, canción que abría su Infinity Land de 2004. Pasión que no hizo sino crecer cuando vi como estos tres escoceses se comían el escenario de La Riviera madrileña como teloneros de Bloc Party antes de publicar Puzzle (14th Floor, 2007), cuarto disco de su carrera y que les haría dar el definitivo paso de gigante que tanto merecían. Una zancada que marcó el camino hacia donde están ahora, llenando grandes recintos en el Reino Unido, colando canciones en la radio y siendo versionados hasta en programas de televisión como el Factor X británico. Poco queda ya de aquellos Biffy Clyro crudos, inmediatos, que grababan discos en un día y cuyas canciones eran inescrutables sendas de excitación continua. Estos han dado paso a unos Biffy más pausados, previsibles y con unas grandes producciones detrás que les han llevado incluso a incorporar dos músicos de acompañamiento para los directos de su próxima gira. Que los actuales Biffy Clyro gusten más o menos que los de hace diez años dependerá del criterio de cada uno (y tal vez también del momento en el que se escucharon por primera vez) pero ni los que prefieren a los añejos ni los que disfrutan más con los de ahora pueden negar el potencial de Opposites. Ni más ni menos que veinte canciones (divididas en dos discos y sin una clara diferenciación entre ellos) que les han permitido experimentar con su sonido, facturar temas directos y gustarse entre esas perfectas melodías que siguen la estela marcada por Only Revolutions, su anterior trabajo de estudio. Los escoceses se dan el placer de sacar a relucir su lado más atípico basándose en teclados y atmosféricos sintetizadores en canciones como ‘The Fog’ o ‘Skylight’, impregnándose de un sorprendente aire soul en ‘Trumpet Or Tap’ y hasta rodeándose de un grupo mariachi para ‘Spanish Radio’. Por otra parte vuelven a recurrir al melódico y accesible single en potencia que tan buenos resultados les ha dado para temas como ‘Black Chandelier’, la jovial ‘Pocket’ o la dupla que forman ‘Opposites’ y ‘Accident Without Emergency’, con la colaboración en ambas de Ben Bridwell, cantante de Band of Horses. Y para contentar a los fans más antiguos recuperan parte del nervio que nunca llegaron a perder en otras como ‘Sounds Like Balloons’, la anfetamínica ‘The Joke’s On Us’ o la inmediata ‘Modern Magic Formula’. En definitiva, Opposites es una nueva colección de grandes canciones que reivindican un sonido que, tome el camino que tome, sigue demostrando personalidad y mantiene al grupo en ese equilibrio perfecto otorgado por una ya larga carrera.
[Texto]: Iván Díaz
