[North Mississippi Allstars + White Cowbell Oklahoma @ Caracol. Madrid. 18.05.2011]
[Promotor: Noise On Tour]
Doble cartel de lujo el que pudimos presenciar en la Caracol el pasado miércoles. Por un lado, y abriendo la velada, desde Ontario (Canadá) llegaban White Cowbell Oklahoma, con una formación de seis miembros, que demostraron ser capaces de hacer mover las caderas al personal, desde el primer minuto cuando arrancaron con ‘Monster Railroad’, boogie rock de alto octanaje, cien por cien adictivo; continuaron con ‘Cheerleader’, en donde Charles Chainsaw, el señor disfrazado de cowboy que toca el cencerro, hace saltar las chispas de su instrumento al manipularlo con una sierra eléctrica, o radial, obteniendo un magnifico efecto visual; y prosiguieron con ‘Got My Love’ donde el vaivén frenético de los pies era inevitable, como si una fuerza externa se hubiera apoderado de nuestros movimientos. El arranque era perfecto, el sonido bastante decente y la cosa prometía mucho, así pues, decidieron imprimir algo mas de color y calor, y para la interpretación de ‘Pole Cat’, Mr. Chainsaw prende fuego a su cencerro, a la vez que lo aviva lanzando llamaradas mediante un spray e incluso se atreve a encender un cigarrillo con esa misma lumbre, logrando su objetivo. Las guitarras de ‘The Cousin Who Hath No Name’ (curioso el apodo) y de Hollis P.C., en ocasiones también parecían echar fuego metafóricamente hablando, mientras su frontman Clem C. Clemsen, que además toca la guitarra en algunas canciones, incita a los presente a corear juntos, dos autenticos pelotazos como ‘Do Me So Wrong’, muy en la línea ZZ y ‘South Moutes’ puro southern rock con tonos tex-mex y matices setenteros. Después de cuarenta minutos nos obsequiaron, a modo de bis, con una versión que no estaba incluida en el set-list, ni mas ni menos que el ‘Speed King’ de los Purple, consiguiendo liberar las tensiones acumuladas. Definitivamente W.C.O. fueron muy gratificantes y son altamente recomendables.
Y por otro lado, desde la localidad de Hernando en Mississippi, venían en formato de dúo, North Mississippi Allstars. Únicamente los hermanos Dickinson, Luther a la guitarra y Cody en la batería, sin la inestimable ayuda del gran bajista Chris ‘Big’ Chew, que no compareció para el directo, aunque sí grava con ellos los discos; se valieron por sí mismos para desarrollar una magistral actuación, repasando extractos de sus álbumes y haciendo especial hincapié en su último Keys To The Kingdom (Songs Of The South Records, 2011), con temas como ‘Let It Roll’, la stoniana ‘This Away’, unos tintes country con ‘Jumperclable Blues’, el recuerdo a Dylan en ‘Stuck Inside Of Mobile With The Memphis Again’ o ‘The Meeting’ en la que Luther hace uso del lobelow, un instrumento de cuatro cuerdas formado con una caja de puros como cuerpo, con un sonido realmente asombroso. Cody, que además de pegarle a los parches, en algún tema toca la guitarra, también nos muestra otro de esos curiosos artilugios, la woogie board, aunque a todos nos pudiera parecer una tabla de las de lavar antiguamente, con la que es capaz de extraer con precisión ritmos y sonidos coqueteando con el acid. En la recta final Luther nos sorprende con otro de sus originales artefactos, este de dos cuerdas, ingeniado con una lata de chocolate a la taza, haciendo de cuerpo, agregando una pastilla y rudimentariamente unido con cinta de embalar a un palo, del que consigue sacar sorprendentes sonidos.
Ración al cuadrado de rock sureño, que a modo de terapia consigue aliviar cualquier brote de tensión o mal rollo con síntomas evidentes. Una autentica delicatessen.
Nota: A quien corresponda imprimir los horarios de las actuaciones en las entradas, llámese sala, grupo, manager, promotor, Ticketmaster, etc. convendría que se lo tomaran un poquito más en serio, pues ya lo decía Rosendo “engañar al personal es muy polémico‘”.
[Texto]: Juan Carlos Velasco
[Fotografías]: Gema Esteban ‘Muti’