[Ministry + Djerv @ La Riviera. Madrid. 24.07.2012]
[Promotor: Last Tour International]
El nombre de los mil nombres, Al Jourgensen, irrumpió en la madrileña sala La Riviera botella de vino en mano, sombrero en cabeza y con muchas ganas de pasarlo bien. Tras más de hora y media de concierto dentro de su particular «DefibrillaTour» con el que pondrá punto y final a sus Ministry, el vocalista se marchó por donde vino con la sensación de haber realizado un gran trabajo, esta vez sin la botella, entonces vacía, dejada sobre el escenario. En medio, en la que parece ser la gira de despedida de la mítica banda de metal industrial, tuvo tiempo para bailar de una forma peculiar, desgañitarse frente a su particular pie de micro, bajar al público a darse un baño de masas entre sus incondicionales y demostrar que, a pesar de su más que cuestionable aspecto físico, sigue siendo un gran frontman. Cierto es que entre tatuajes, piercings, trenzas y ropajes su personalidad ha tornado en burlona, pero la esencia de su música, lo que verdaderamente importa, sigue patente en sus conciertos.
Arropado por una gran banda de mercenarios musicales (Mike Scaccia, Sin Quirin, Casey Orr, Aaron Rossi y John Bechdel), el norteamericano de origen cubano dio el pistoletazo de salida con la canción que hace lo propio en su nuevo disco Relapse (13th Planet Music, 2012), ‘Ghouldiggers’, mezclando su fuerza sónica con dos luces estroboscopios que no dejaron de ser parte del show durante toda la noche. Tras una coreada ‘No W Redux’ y una intensa ‘Rio Grande Blood’ que dedicaron a George W. Bush con unas malsonantes palabras, se despacharon sin tapujos con otras dos canciones del disco de mismo título, Río Grande Blood (13th Planet Music/Megaforce Records, 2006), ‘Señor Peligro’ y ‘LiesLiesLies’, uno de nuestros momentos preferidos de la noche gracias a su intensidad. Seguido presentaron otra nueva canción, ’99 Percenters’, encadenando otros cuatro cortes pasados (‘Watch Yourself’, ‘Life Is Good’, ‘Waiting’, ‘Worthless’) y gustarse con ‘Relapse’, composición que titula su duodécimo álbum de estudio. Previo a retirarse hacia el backstage se despidieron con ‘The Last Sucker’ y ‘Khyber Pass’.
Con su lado trash más presente y obviando en algunos ratos el sonido industrial que tan característico ha sido en sus tres décadas de carrera musical, rescataron lo mejor de su legado con ‘N.W.O.’, ‘Just One Fix’, ‘Thieves’ y ‘So What’, siendo la parte de la noche más celebrada entre los presentes por motivos propios. Nueva salida hacia la parte trasera del escenario antes de volver y rematar la faena con la nueva ‘United Forces’, dejando satisfechos a todo el mundo y dando por finiquitado su paso por Madrid antes de hacer lo propio en Barakaldo y despedirse, ahora parece que sí, del territorio español.
Previamente el turno fue para los noruegos Djerv, quinteto de rock con influencias varias que presentaron algunas canciones incluidas en su disco debut, el homónimo Djerv (Djerv Music, 2011). Con su vocalista Agnete Kjolsrud como principal protagonista, no consiguieron levantar mucha expectación, es más, su presencia sobre las tablas pasó bastante desapercibida. El atronador sonido que salía de los altavoces empañó una actuación de treinta minutos que no será recordada por los presentes.
Más fotografías de Ministry y Djerv.
[Texto]: Alfredo Rodríguez
[Fotografías]: Alfredo Rodríguez