Hamlet @ Rockitchen. Madrid. 12/13.04.2013

[Hamlet @ Rockitchen. Madrid. 12/13.04.2013]
[Promotor: Get In]

Hamlet

Hamlet es sin duda uno de los grupos culpables de que a día de hoy gaste parte de mi tiempo en escribir textos como el que estás leyendo. Discos como Revolución 12.111 (Zero Records, 1996) o Insomnio (Zero Records, 1998) dieron forma hace quince años a una pasión por la música que prevalece a día de hoy y que me ha llevado a recibir con los brazos abiertos cada nuevo paso que el grupo madrileño ha dado, que no han sido pocos. Más de 20 años de carrera sin un ápice de estancamiento que permiten al grupo  llevar a cabo propuestas como la de este fin de semana en Madrid con tan contundente éxito. Aunque siempre habrá quien piense que rescatar viejos discos para el directo denota falta de ideas, no hay más que ver la carrera sin pausa de Hamlet para entender que dedicar a estas alturas una gira a un disco como Insomnio, y además rematarla con una noche dedicada a Syberia (Locomotive Music, 2005), es más bien un bonito detalle. Bonito para nosotros y bonito también para ellos, a tenor de lo visto sobre el escenario de la sala Rockitchen durante las dos noches que nos ocupan.

La primera de ellas ponía fin a una gira que apunta a nuevas ciudades y en la que se celebraban los quince años de la edición del ya mencionado Insomnio, un importantísimo tercer trabajo (sin tener en cuenta Peligroso (Vulcano/Dro, 1992)) que supuso un antes y después en la carrera del grupo. Con él como claro protagonista y la sala hasta los topes arrancaba un show demoledor en el que sonaron las doce canciones que dan forma al disco en el mismo orden que en su versión de estudio. Asusta apreciar lo vigente que siguen a día de hoy letras como las de ‘Tortura-Visión’ o ‘Dónde Duermo Hoy’ e impresiona ver como el grupo está más en forma que nunca. Molly sigue siendo un frontman espectacular (por mucho que les pese a algunos) y manejó a su antojo a un público entregado que parecía disfrutar de un constante karaoke mientras que los ya totalmente integrados Álvaro Tenorio (bajista) y Alberto Marín (guitarra) dotaban a estas viejas canciones de una mayor contundencia. Abrasadores sonaron en el riff inicial de ‘Tan Simple Como Decir No’, en el final de la rápida ‘Quién Cree Que Raquel Se Suicidó’ o en ‘Lacabra’, en la cual un Molly inmerso entre el público puso la sala patas arriba. Y tras este repaso sin freno decidieron dedicar la segunda tanda de canciones a rescatar el siguiente disco del grupo, bautizado como El Inferno (Zero Records, 2000). Sin un segundo de relajación sonaron habituales de éste, como ‘Denuncio a Dios’ o ‘Vivir Es Una Ilusión’, además de grandes olvidadas como ‘Lárgate Despacio’, ‘Miserable’ o ‘Buena Suerte’ y hasta un total de siete canciones. Y rozando las dos horas de concierto retomaron el escenario para poner fin a la primera noche con ‘Un Mundo En Pausa’, de su último disco, Amnesia (Roadrunner Records, 2011), y la imprescindible ‘Irracional’, con un nuevo baño de masas, no solo de Molly sino también del guitarrista Luis Tárraga, que acabó tocando sobre las cabezas de un público exhausto.

Con las fuerzas renovadas llegaba la segunda noche, en la que el grupo cambiaba de tercio para rendirse a Syberia, su disco más melódico, intimista y oscuro. Algo incomprendido en su momento pero muy apreciado a posteriori, los doce temas que forman el disco sonaron esta vez desordenados en cuanto al orden del estudio pero frescos y directos como nunca. Lo que el grupo perdió en garra respecto a la noche anterior lo ganó en contundencia y Molly aprovecho para hacer gala de una voz de lo más versátil. Abrieron con las directas ‘Aislados’ y ‘Dame Una Señal’ para terminar con las clásicas ‘Serenarme (En La Desolación)’ e ‘Imaginé’ y por el camino nos brindaron algún momento de lo más emotivo como el protagonizado por ‘Desaparecer’, seguramente el tema más melódico de la carrera del grupo. Y tras la entrega sobre el escenario de un Disco de Oro por las ventas de Syberia la banda se soltó la melena para abordar parte de Hamlet (Locomotive Music, 2002), el conocido como “disco negro”. Con canciones como ‘Vivo En El’, ‘No Lo Entiendo’, ‘Esperaré En El Infierno’ o ‘Limítate’ volvieron unos pogos que fueron una constante la primera noche y viendo lo mucho que estaban disfrutando Hamlet sobre el escenario no sería de extrañar que en algún momento haya una fecha dedicada a este disco. De momento llegamos al fin de estas dos con ‘Egoísmo’, ya con una de las luces principales de la sala encendida y otra vez tras cerca de dos horas de concierto.

Dos noches, 42 canciones, casi cuatro horas de música en directo y unos músicos más en forma que nunca. Hamlet son el mejor grupo de metal que ha dado esto país, pero eso ya lo sabíamos.

[Texto]: Iván Díaz
[Fotografía]: Rebeca Saray