Jay-Jay Johanson @ Matadero Madrid. Madrid. 25.10.2012

[Jay-Jay Johanson @ Matadero Madrid. Madrid. 25.10.2012]
[Promotor: Días Nórdicos/Planet Events/Zona de Obras]

Madrid diluviando, una de esas noches en las que se agolpan conciertos apetecibles aunque no apetezca salir de casa a calarse entera. Mi elección fue Jay-Jay Johanson en el Matadero Madrid, dentro de la propuesta Días Nórdicos. Con su única actuación en España este año, el cantante y compositor sueco hacía su aparición en la capital. Mi curiosidad era grande, desde su impresionante Poison (RCA, 2000) le había perdido la pista. Ese era su tercer trabajo y hablamos de un artista con diez discos, dos de ellos bandas sonoras. Esto quería decir que me podía encontrar cualquier cosa. Salir fascinada o dormirme. Sucedió lo primero y con creces. Cuando llegué a la nave donde se celebraba el concierto ya había gente agolpada al pie de un pequeño escenario. He de decir que el espacio es una maravilla, los techos altos y la estructura original que conserva del antiguo matadero, junto a las plantas y estudios de grabación dispuestos en cabañitas alrededor, le dan un aspecto acogedor, que invita a quedarse muy a gusto y de manera indefinida.

A las diez y media se apagó la luz y apareció en escena Jäje, lánguido y risueño, con un solo músico que le acompañaría toda la noche al teclado. La puesta en escena eran ellos dos y una pantalla donde al más puro estilo de la Factory de Warhol se sucedían primeros planos de personas anónimas en blanco y negro, que miraban a cámara durante largos minutos y se movían lentamente. Es curioso lo que provoca la voz y las composiciones de este hombre, que parece sacado de otro tiempo y a veces incluso diría que de otro planeta. Y es que consigue transportarte a un lugar donde no has estado antes. Te lleva a su terreno con enorme facilidad y antes de que acabe el primer tema estás flotando en su atmosfera. De apariencia frágil y delicada, desgarbado y con una sonrisa contagiosa enternece la aparente timidez con la que está en el escenario. Cantando derrocha un timbre nostálgico y personal. Jäje tiene una voz maravillosa, hace con ella lo que quiere con asombrosa facilidad, pero vamos no llego yo a esos agudos ni en la ducha. De fácil nada, arte es lo que tiene. Y luego están sus canciones, dudaba si me iba a gustar el concierto en su totalidad porque si era fan de algo, era del citado Poison, pero el repertorio no me dejó despistarme ni un solo instante. Tiene temas atemporales, que suenan a clásicos desde la primera escucha, como ‘Far Away’. A veces, durante la noche tuve la sensación que estaba marcándose un concierto de versiones. Porque podíamos estar tranquilamente en otra época. Te encuentras dentro de la nostalgia de recuerdos que no tienes. Y sonríes sin saber porqué, mientras te dejas llevar por sus letras melancólicas, emocionándote con ‘Believe In Us’ como si fuera la primera vez que la escuchases. Asistir a un concierto de Jay-Jay Johanson es una experiencia diferente a lo habitual. Un lujo de noche, con lluvia y todo.

[Texto]: Ulía Moreno
[Fotografías]: Maite Nieto